Crónica España.

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Reino Unido afirma que la suspensión de licencias de armas no afectará la seguridad de Israel.

Reino Unido afirma que la suspensión de licencias de armas no afectará la seguridad de Israel.

En declaraciones recientes, el ministro de Defensa del Reino Unido, John Healey, ha enfatizado que la suspensión de 30 permisos de venta de armas a Israel no debilitará significativamente su capacidad de defensa, al mismo tiempo que reitera el compromiso de Londres como "un aliado sólido" de la nación asiática.

MADRID, 3 Sep.

Healey ha explicado en una entrevista con la BBC que esta medida, anunciada por el ministro de Relaciones Exteriores británico, David Lammy, no tendrá un impacto importante en la capacidad de Israel para protegerse a sí mismo en medio del conflicto provocado por los ataques del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas.

Enfatizó que el Reino Unido sigue apoyando a Israel y que la decisión se tomó respetando el Estado de Derecho, abogando por un alto el fuego en Gaza para poner fin a la violencia.

Healey también defendió el momento del anuncio, señalando que es parte de un proceso legal y no una decisión para complacer a alguna de las partes involucradas. Manifestó que no hay un buen momento en medio de un conflicto tan intenso y brutal y aseguró que Londres seguirá respaldando a Israel en caso de ser atacado.

El ministro explicó que las licencias suspendidas aplican a armas utilizadas con fines ofensivos y aclaró que los componentes para los aviones de combate F-35 no están incluidos en la medida.

Estas declaraciones se produjeron después de que el ministro israelí Yoav Gallant expresara su desaliento por la decisión del Reino Unido, señalando las difíciles circunstancias en las que se encuentran al combatir una guerra en múltiples frentes.

Lammy explicó que la suspensión de las licencias de armas no es un embargo como represalia a la ofensiva en Gaza, sino que responde a una obligación legal de revisar caso por caso las autorizaciones de venta de armas en conflictos de este tipo.

Tras los ataques del 7 de octubre, que dejaron alrededor de 1.200 muertos y casi 250 secuestrados, las autoridades gazatíes han informado de cerca de 40.800 palestinos fallecidos, sumados a más de 660 muertos en Cisjordania y Jerusalén Este a manos de las fuerzas israelíes o colonos.