En el panorama mediático de España, la separación de Irene Rosales y Kiko Rivera ha captado la atención de amigos y seguidores, quienes han expresado su opinión sobre el fin de su relación después de más de una década juntos. Raquel Bollo, conocida en el círculo de la pareja, ha sido una de las voces más destacadas, afirmando que la pareja había estado en crisis desde hace tiempo. "En su momento mencioné que el cariño entre ellos había cambiado; ya no era el de una pareja, sino más bien el de una madre y un hijo", comentó durante el evento del 25º Aniversario de la Fundación Pequeño Deseo.

Bollo hizo hincapié en la juventud de ambos y en la necesidad de que encuentren la felicidad por separado, subrayando la importancia del respeto mutuo, especialmente pensando en las hijas que comparten. "Lo que deseo es que se respeten por el bien de las niñas y que crezcan en un entorno feliz. Lo más importante es que cada uno encuentre su camino y sea feliz", resaltó, dejando entrever que la decisión tomada por la pareja es una clara mejora en sus vidas.

Cuando se tocó el tema de la nueva pareja de Irene, Guillermo, Raquel optó por mantener una actitud cauta. "Pienso que el tiempo será el que determine si esta relación tiene futuro. Al final, andando y caminando se sabrán las cosas", reflexionó, sugiriendo que el desarrollo de este nuevo vínculo aún está por verse.

Además, al ser interrogada sobre su amiga y excompañera de programa, Terelu Campos, quien se ha aventurado en la actuación, Bollo no escatimó en elogios. "Siempre me alegra su éxito, pues es una mujer que ha trabajado duramente en su carrera y ha lidiado con el estigma de ser hija de alguien famoso. Le deseo la mejor de las suertes en su regreso a los escenarios", concluyó, mostrando un apoyo incondicional hacia su trayectoria profesional.