Carles Puigdemont, el ex presidente de la Generalitat, ha dejado claro que su regreso a Cataluña no fue para ser arrestado, sino para ejercer su derecho a resistir lo que considera una opresión por parte de los jueces al no aplicar la Ley de Amnistía. En un artículo publicado en el portal 'Politico', Puigdemont expresó que considera que cuando un juez se niega a aplicar la ley democrática, eso equivale a una forma de opresión que ningún demócrata debería tolerar.
El político catalán relató que su escape tras el discurso en el Arc de Triomf justo antes de la sesión de investidura en el Parlament fue complicado, comparando el operativo de los Mossos d'Esquadra con el desplegado tras los atentados de Barcelona y Cambrils. Según Puigdemont, si hubiera intentado entrar en el Parlament como había planeado inicialmente, hubiera sido como entregarse a las autoridades judiciales, a las cuales considera sin autoridad legal para perseguirlo.
En cuanto a su escape en coche, Puigdemont especificó que no se escondió en el maletero, sino que se sentó en la parte trasera de un vehículo privado que lo llevó a la frontera con Francia. Ahora, espera que la justicia regrese a los tribunales españoles y que los jueces respeten la ley aprobada para poder regresar definitivamente a España.
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