MADRID, 2 Jun.

El jugador de balonmano Pablo Urdangarín, hijo de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, deja el Barcelona B después de dos temporadas para unirse al Granollers en busca de más minutos en el campo y seguir creciendo como joven promesa.

Para el sobrino del Rey Felipe VI ha sido un proceso difícil despedirse del club en el que ha pasado tantos momentos importantes. Este jueves, en su último partido en el Palau Blaugrana, estuvo acompañado en las gradas por su padre y su novia Johanna Zott, quien demostró que su relación con Pablo es sólida y a prueba de todo.

La pareja de Urdangarín, a la que él conoce desde hace años, se presentó en el evento sonriente y demostrando su naturalidad y simpatía ante las cámaras. Agradeció los buenos deseos de la prensa para el último encuentro de su novio con el Barcelona y afirmó estar feliz por su fichaje con el Granollers.

Por su parte, Iñaki Urdangarín evitó hacer declaraciones durante el evento. Testigos confirmaron que el exmarido de la Infanta Cristina no perdió detalle del partido, en el que su hijo anotó seis tantos y contribuyó a la victoria de su equipo.

Aunque el joven Urdangarín no ha hecho comentarios sobre su nueva etapa deportiva con el Granollers, se rumorea que podrían haber problemas económicos en el proceso de divorcio de sus padres. Pablo prefirió no confirmar ni desmentir estas informaciones.