En un clara representación de su preocupación por la creciente tensión en Oriente Medio, la Organización de Naciones Unidas ha expresado este viernes su pena ante lo que describen como los más devastadores ataques de las Fuerzas Armadas israelíes contra el Líbano en décadas. La ONU ha hecho hincapié en la situación crítica en Siria, la cual se ha visto deteriorada por el considerable número de desplazados que se dirigen hacia su frontera con el Líbano.

El representante de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Líbano, Ivo Freijsen, ha declarado que la reciente escalada de ataques aéreos e incursiones terrestres por parte de Israel ha exacerbado enormemente la ya trágica crisis humanitaria que afecta a los civiles libaneses. Añadió que las últimas semanas han sido especialmente letales, marcando un periodo de extrema devastación para el pueblo libanés en los tiempos modernos.

Freijsen también destacó que la creciente incertidumbre en el Líbano ha llevado al desplazamiento de aproximadamente un millón de civiles, lo que representa uno de cada cinco habitantes del país. De esos desplazados, cerca de 600,000 han buscado refugio en Siria, incrementando así la tensión en la región frontera.

Este alarmante "desplazamiento masivo" ha creado no sólo un riesgo considerable en la línea limítrofe, sino también una creciente desesperación para ambos pueblos. ACNUR ha observado que alrededor de 50 libaneses regresan a casa diariamente, atraídos por la desastrosa situación económica que enfrentan en Siria.

"Las personas están regresando porque les resulta difícil sobrevivir aquí a fin de mes, ya que el apoyo no es suficiente. Creen que la situación puede ser mejor en el Líbano. Aunque estos son números pequeños, para nosotros, incluso unos pocos son motivos de serias preocupaciones," afirmaron desde ACNUR.

A la crisis humanitaria se suma la alarmante destrucción de infraestructura médica y equipos de salud en la región, además de los ataques sistemáticos al personal sanitario. Abdinasir Abubakar, representante de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Líbano, ha señalado que estos ataques a la atención médica son una característica del conflicto en Líbano que "es sin precedentes".

Abubakar manifestó que el número de ambulancias atacadas ha aumentado, resaltando que cada asalto a estos vehículos de emergencia suele resultar en la muerte de varios paramédicos. Desde el 8 de octubre del año pasado, han sido asesinados más de 225 trabajadores de la salud, con un asombroso 47% de los ataques a la atención médica resultando fatales, un porcentaje que supera ampliamente el promedio global de zonas de conflicto, que es del 33%.

Según el último informe del Ministerio de Salud Pública de Líbano, al menos 3,645 personas han perdido la vida y otras 15,355 han sido heridas a consecuencia de los ataques llevados a cabo por las Fuerzas de Defensa de Israel durante el último año.

Este incremento en la violencia se relaciona con los enfrentamientos que comenzaron hace más de un año, tras un ataque de Hezbolá a territorio israelí luego de los eventos del 7 de octubre de 2023, que a su vez provocaron que el Ejército israelí lanzara una feroz ofensiva en la Franja de Gaza, donde más de 44,000 personas han muerto hasta la fecha, incluyendo más de 790 palestinos en Cisjordania y Jerusalén Este.