Una empresa propiedad de un noruego está siendo investigada por su posible conexión con la venta de los dispositivos explosivos a Hezbolá, el partido-milicia chií que provocó la tragedia en Líbano la semana pasada.

En declaraciones a Europa Press, el fiscal Haris Hrenovica confirmó que el Servicio de Seguridad de la Policía de Noruega ha iniciado una investigación preliminar para determinar si hay motivos para abrir una investigación formal.

La empresa bajo escrutinio es Norta Global, con sede en Sofía, Bulgaria, y fundada en 2022 por el ciudadano noruego Rinson Jose, según las autoridades búlgaras.

Las autoridades búlgaras también señalaron que la empresa no fabricó, importó o exportó los dispositivos explosivos desde Bulgaria, lo que ha llevado a especular sobre la posible participación de Norta Global en la transacción.

Las pesquisas iniciales llevaron a la empresa taiwanesa Gold Apollo, que posteriormente cedió los derechos de fabricación a la empresa húngara BAC Consulting, desencadenando registros en ambas empresas en Taiwán.

Sin embargo, el Gobierno húngaro ha afirmado que BAC Consulting es simplemente un intermediario comercial sin capacidad de fabricación, lo que ha llevado a las fuentes a señalar a Norta Global como el verdadero facilitador de la venta de los dispositivos a Hezbolá.