En un emocionante anuncio realizado en Viladrau, Barcelona, el reconocido chef Nandu Jubany, que cuenta con una estrella Michelin, ha desvelado sus planes para participar en el Rally Dakar 2026. Este evento se llevará a cabo en Arabia Saudita del 3 al 17 de enero, y marca la tercera vez que Jubany toma la salida, esta vez en la categoría de coches junto a su copiloto Marc Solà. Su meta es repetir el éxito que tuvo el año anterior al llegar al podio en la categoría de dos ruedas motrices, además de aspirar a un lugar en el ‘Top 20’ en la clasificación general.

Durante la presentación, Jubany expresó su perspectiva sobre la competición: “No tengo ilusiones de ganar el Dakar. Me apasiona, pero no soy ingenuo. Soy consciente de mis capacidades. Mi objetivo es ser el primero de mi categoría (buggy) y un ‘Top 20’ general sería increíble”. El evento tuvo lugar en la finca El Masnou, donde el chef cuenta con un circuito de pruebas, y reunió a amigos, familiares, patrocinadores y miembros de la prensa.

Aunque su nuevo buggy solo logró recorrer tres kilómetros antes de sufrir una avería en la caja de cambios, Jubany mantuvo el buen humor durante el contratiempo. “Este año hemos enfrentado dificultades que no tuvimos el año pasado. Hoy, en solo tres kilómetros, rompimos el cambio”, comentó con ironía, antes de ofrecer vueltas a los asistentes en un coche de rally de Xevi Pons.

Jubany, quien obtuvo el segundo lugar en su categoría y se convirtió en el primer español en la general en el Dakar 2025 (situándose en el 19º puesto en Ultimate y 27º en la general), se enfrenta a esta nueva edición con un buggy Optimus potenciado. “Hemos agregado aire acondicionado, aumentado la potencia en 50 CV y mejorado las suspensiones. Si no soy yo quien lo destroza, debería estar bien. Aunque hoy parece que debía ocurrir esto. El Dakar es así, tienes que seguir adelante a pesar de los obstáculos”, añadió.

Definiéndose como un competidor nato, el chef subrayó la importancia de mantener la calma durante las etapas más complicadas del rally. “Tendré que ser prudente e inteligente, y escuchar a Marc, que es un reto. Debo minimizar el riesgo de romper algo, ya sea una rueda o un palier. Si logro eso, creo que las cosas irán muy bien”, aseguró.

En relación al recorrido de 2026, Jubany se mostró satisfecho con la continuidad en la dureza del rally. “Cuanto más complicado, mejor. No hago un análisis detallado de las etapas porque no me gusta. Cuantas más piedras, mejor; las etapas rápidas son más difíciles para mí. Me adapto mejor a los tramos técnicos, aunque corra el riesgo de pinchar”, explicó.

Marc Solà, su copiloto, también resaltó la excelente conexión entre ambos y compartió la ambición de repetir el éxito anterior. “Si nos hubieran ofrecido el podio el año pasado, lo habríamos aceptado, y este año aspiramos al mismo resultado. Venimos más preparados y deseosos de mejorar. Aunque seguro tendré que hacerle frenar a Nandu, que se ha vuelto un poco impaciente”, bromeó el copiloto.

Solà también analizó los cambios en el trayecto, que eliminarán el “Empty Quarter” y la etapa de 48 horas. “El sector de dunas puede parecer más sencillo, pero puede ser más traicionero; hay que estar alerta. En la etapa maratón, donde no hay asistencias, hay que acelerar al inicio, pero también conservar energía”, advirtió.

Con esta participación, Jubany se prepara para su tercer Dakar consecutivo, uniendo su peculiar trayectoria deportiva a su exitosa carrera en la gastronomía, siempre con el mismo espíritu: “El Dakar es eso: tirar y seguir adelante sin importar lo que suceda”, concluyó Jubany con determinación.