Crónica España.

Crónica España.

Mahle promete una solución viable para quienes han sido despedidos.

Mahle promete una solución viable para quienes han sido despedidos.

CUENCA, 23 de octubre.

La corporación Mahle ha subrayado su intención de encontrar "una solución que sea justa y socialmente aceptable" para los trabajadores que se verán impactados por los planes de reestructuración en Motilla del Palancar, donde se prevé la afectación de alrededor de 550 empleados, y en Valencia, donde se estima que sean unos 190.

Mediante un comunicado, la empresa ha indicado que están gestionando un "intercambio de información constructivo y transparente" con los representantes laborales. La compañía destaca que las reuniones con la comisión de negociación han sido positivas y han mostrado un compromiso mutuo por avanzar en el diálogo.

Mahle ha tomado la decisión de implementar estos ajustes tras un minucioso análisis de todas las opciones disponibles, reafirmando su compromiso de continuar operando en España en el futuro.

De manera complementaria, Mahle colabora en un grupo de trabajo para la reindustrialización que ha sido promovido por el Ministerio de Industria, así como con los gobiernos de Castilla-La Mancha y de la Comunidad Valenciana, con el propósito de identificar alternativas industriales que puedan mitigar el impacto de estas reestructuraciones en las dos localidades.

Las plantas de Motilla y Valencia, que forman parte de un destacado centro de electromovilidad de Mahle en Europa, han sido "particularmente afectadas por las condiciones del mercado y los retrasos en la electrificación".

Los fabricantes de automóviles han disminuido los pedidos de productos actuales y han decidido posponer futuros proyectos relacionados con la electrificación.

Como resultado, las instalaciones de Mahle dedicadas a la producción de productos de electrificación están operando por debajo de su capacidad, sin perspectivas de mejora a corto plazo.

Además, ambos centros se enfrentan al fin de los ciclos de productos actuales de los fabricantes de equipos originales, que incluyen componentes de Mahle relacionados con la electrificación, sin que se anticipen proyectos de sustitución en el horizonte cercano debido a las condiciones del mercado y cambios en la estrategia de los clientes clave.

La considerable discrepancia entre la caída de la demanda y la capacidad de producción existente ha llevado a la empresa a realizar ajustes operativos, según insisten desde Mahle.

Al igual que el resto del sector automotriz, Mahle enfrenta "desafíos significativos derivados de varios factores externos", que incluyen la incertidumbre económica, la debilidad de los mercados globales automotrices, los aranceles y, especialmente, los atrasos en la adopción de la movilidad eléctrica, lo que ha repercutido de forma negativa en sus operaciones.