La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) ha denunciado la trágica muerte de al menos 176 personas que habían buscado refugio en las escuelas en la Franja de Gaza, mientras huían de los bombardeos israelíes. Esta lamentable situación ha generado una gran preocupación en la comunidad internacional.
Según el comisionado general de la misión, Philippe Lazzarini, desde el inicio de la guerra se ha informado de que al menos 176 refugiados han perdido la vida y casi 800 más han resultado heridos debido a los bombardeos por parte de las fuerzas israelíes. Sin embargo, hasta el momento no se ha podido confirmar esta cifra de manera oficial, pero se está trabajando en su verificación.
Lo que sí ha sido confirmado por Lazzarini es que al menos 17 instalaciones de la UNRWA han sido blanco directo de los bombardeos. Esto es sumamente preocupante, ya que la cantidad de instalaciones afectadas y el número de civiles muertos no pueden ser simplemente considerados como 'daños colaterales'. Es importante resaltar que en la mayoría de estas instalaciones había familias refugiadas.
Entre los afectados se encuentran personas mayores, padres y niños, quienes habían buscado protección en estos edificios claramente marcados como instalaciones de la ONU con bandera azul. Resulta inaceptable que en medio de este conflicto estas vidas estén siendo ignoradas y desvaloradas.
Es crucial recordar que la misión de la UNRWA constantemente comparte las coordenadas de los edificios con las partes involucradas en el conflicto, con el objetivo de prevenir ataques y garantizar la seguridad de los refugiados. Sin embargo, estos esfuerzos parecen no estar siendo tomados en cuenta.
Este trágico episodio es una muestra clara de que la guerra en Gaza está llegando a un punto sin retorno. Las reglas básicas de la humanidad están siendo ignoradas, y la vida de los civiles es tratada con desprecio. Es urgente un alto el fuego humanitario para poner fin a esta crueldad y garantizar la seguridad de todos los afectados.
Uno de los casos más impactantes fue el ataque a la escuela de Al Fajura, ubicada en el norte de Gaza y convertida en refugio, donde perdieron la vida al menos 24 personas. No podemos permitir que estos refugios que deberían ser espacios seguros para los civiles sean atacados y provoquen la muerte de niños y personas inocentes. Estos horribles actos no solo violan las reglas de la guerra, sino que también demuestran un total desprecio por la humanidad.