MADRID, 20 de marzo.

La conocida actriz Karla Sofía Gascón presentó hoy su libro 'Lo que queda de mi' (Almuzara), donde abordó varios temas polémicos. Durante la presentación, Gascón afirmó de manera contundente que es “menos racista que Gandhi y menos de Vox que Echenique”, añadiendo que hay quienes han intentado silenciarla, y en ciertos aspectos, lo han logrado.

En un tono reflexivo, la actriz aludió a la tendencia de reaccionar de manera visceral ante situaciones críticas, como los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid. Gascón expresó: “Sí, puedo haberme equivocado, pero ¿qué debería decir? ¿Cáspitas? ¿Hasta cuándo se me va a pedir perdón?”

A pesar de las controversias, Gascón sostiene que no se arrepiente de sus experiencias pasadas, pues considera que de ellas se extraen lecciones valiosas. Además, enfatizó que “el odio no se resuelve con más odio. La paz es lo que todos deberíamos buscar”, durante su encuentro con distintos medios en la sede de su editorial en Madrid.

La artista también lanzó críticas a aquellos que le reprochan su postura. Aseguró que “nadie tiene por qué perdonarme”, salvo aquellos que se sientan directamente ofendidos por sus acciones. Se mostró indignada ante lo que percibe como una hipocresía de quienes la han atacado sin conocerla. “Me han catalogado como racista solo por prejuicios infundados”, declaró.

Afirmando su papel como “justiciera”, Gascón expresó su deseo de conocer la opinión de sus detractores sobre acontecimientos terroristas significativos, como los ataques del 11-S o el 11-M. “Soy solo una persona que ha comentado noticias, no permitiré que digan que estoy blanqueando el nazismo o que apoyo a Hitler”, agregó con firmeza.

La actriz manifestó un profundo respeto hacia la comunidad musulmana, pero también una clara oposición al “fanatismo y al terrorismo que se perpetúa en nombre de la religión”. Subrayó que ha respondido a los problemas relacionados con estas temáticas como una ciudadana consciente.

Gascón admitió que ha optado por distanciarse de la vida pública para no contribuir a la difusión del odio, aunque considera que las críticas hacia ella habrían persistido independientemente de su respuesta. “Decidí apartarme porque claramente lo que dijera no cambiaría la opinión de quienes desean hacerme daño”, explicó.

Finalmente, subrayó la intencionalidad detrás de las publicaciones que la han apuntado, enfatizando que “desde el inicio de las redes sociales, he escrito alrededor de 20,000 mensajes. Que hayan seleccionado exactamente las palabras correctas para causarme daño no es casualidad, es deliberado”.