Indra ha decidido llevar a cabo una junta extraordinaria de accionistas en la que se propondrá la compra del 89,68% de Hispasat por un total de 725 millones de euros. Esta importante reunión se llevará a cabo entre el 27 y el 28 de noviembre, y también se presentarán dos nuevas vocales en el consejo de administración: Mónica Helena Espinosa y María Aránzazu Díaz-Lladó.

Desde mediados de octubre, Indra ha notificado a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) su intención de adquirir el control de Hispasat, incluyendo su rama dedicada a satélites militares, Hisdesat. La CNMC está actualmente en proceso de evaluar esta operación, y la empresa confía en que reciba la aprobación en un plazo de un mes desde la notificación inicial.

Confiando en que se logre la aprobación de la CNMC, Indra anticipa que cuenta con el respaldo que necesitaría para llevar a cabo la junta el 28 de noviembre, fecha que se considera la más probable para el evento. Cabe señalar que, aunque la aprobación de la CNMC es un trámite que se espera, no es un requisito previo para que los accionistas analicen la operación.

El presidente de Indra, Ángel Escribano, ha manifestado recientemente que se espera que la transacción se concluya en noviembre. Escribano también destacó que el proceso requería autorizaciones regulatorias en más de diez países, lo que ha hecho que sea un procedimiento bastante extenso. Tras la aprobación de la CNMC, la compra de Hispasat deberá recibir también el visto bueno del Consejo de Ministros, un trámite que se considera sencillo dado que el Estado español es el mayor accionista de Indra, controlando el 28% de sus acciones a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).

La compañía recordó que el 31 de enero de 2025 se firmó el acuerdo de compra de Hispasat y que dicha operación estaba condicionada a la obtención de varias autorizaciones regulatorias en España y otros países. Además, es necesario llevar a cabo ciertos acuerdos para que Indra logre consolidar Hisdesat en sus operaciones.

En esta misma junta, los accionistas también votarán la reelección de Juan Moscoso como consejero en representación de la SEPI, junto con otros vocales independientes cuyo mandato venció el 28 de octubre. También se votará la reelección de María Teresa Busto, quien se incorporó recientemente al consejo en sustitución de Ángeles Santamaría.

Además, se contempla el nombramiento de Mónica Helena Espinosa Caldas y María Aránzazu Díaz-Lladó como nuevas consejeras independientes, reemplazando a Coloma Armero y Olga San Jacinto, quienes no han sido propuestas para continuar en sus funciones. Espinosa es médica de formación y tiene una sólida carrera profesional en el ámbito de la consultoría y la gestión empresarial, mientras que Díaz-Lladó cuenta con una extensa experiencia en sostenibilidad y ha ocupado roles importantes en empresas como Telefónica.

Es fundamental destacar que la intención de Indra con estos cambios es reforzar un consejo que esté alineado con los retos y objetivos actuales de la compañía, especialmente en relación con su fusión con Escribano Mechanical & Engineering (EM&E), donde surgen diversos conflictos de interés. Ángel Escribano, presidente de Indra, es copropietario de EM&E, lo que ha llevado a la creación de una comisión dentro del consejo para analizar estos posibles conflictos.

Durante la junta, también se discutirá la autorización y delegación de facultades necesarias para formalizar y ejecutar los acuerdos tomados, además de presentar las modificaciones realizadas al reglamento del consejo de administración.