El Ministerio de Salud de Líbano ha reportado trágicamente el fallecimiento de siete personas en la región de Nabatiye, mientras que cinco vidas se han perdido en el sur del país. Esta situación crítica refleja la violencia y el sufrimiento que se vive en la zona debido al reciente conflicto.

MADRID, 22 de noviembre. En la tarde del pasado jueves, las autoridades libanesas actualizaron la información sobre los devastadores ataques que el Ejército israelí ha llevado a cabo en Baalbek, en el este del Líbano. Según los nuevos datos, el número total de muertos ha ascendido a 40, con al menos 52 heridos entre la población civil.

A través de las plataformas sociales, el Centro de Operaciones de Emergencia del Ministerio de Salud libanés ha ofrecido un desglose de las localidades más impactadas, destacando Barha y Falawi como las más severamente afectadas, con once y diez víctimas mortales respectivamente. Este informe pone de relieve las graves consecuencias que ha tenido el conflicto en estas comunidades.

Además, las pérdidas humanas continúan aumentando en otras áreas. Seis personas han sido reportadas muertas en Maqná, cinco en Yunine y tres en Al Zahra. Los bombardeos israelíes también han azotado las localidades de Brital y Amashki, con dos muertos en cada sitio, y un fallecido en Al Rafaqa. Estas operaciones han dejado decenas de heridos, reflejando la escasa seguridad que vive la población en la región.

Por otra parte, el Ministerio de Salud informó que en la gobernación de Nabatiye, al menos siete personas han perdido la vida y 24 han sido heridas como resultado de los ataques aéreos de las fuerzas israelíes. Las víctimas se han presentado en un total de diez localidades, siendo Arabsalim la más afectada, con cuatro muertos y nueve heridos.

En el sur del país, los ataques del Ejército israelí han costado la vida a cinco personas, con 26 heridos, en un total de nueve municipios. Esta ofensiva resalta el deterioro de la situación humanitaria en todo el Líbano.

Desde el 1 de octubre, Israel lanzó una nueva invasión de Líbano, luego de semanas de intensos bombardeos. Esta escalada de violencia fue precedida por el uso de miles de dispositivos explosivos y comunicaciones relacionadas con Hezbolá, tras más de once meses de enfrentamientos en la zona fronteriza. Benjamin Netanyahu, el primer ministro israelí, admitió recientemente su responsabilidad en esta serie de ataques.

Las autoridades sanitarias en Líbano han reportado que, desde el 8 de octubre de 2023, el trágico saldo de víctimas llega a 3.583 muertos y 15.244 heridos. Este aumento significativo de las cifras refleja la gravedad de la situación en la región.

Este repunte de la violencia se enmarca en un contexto de enfrentamientos que datan de hace más de un año, tras el ataque de Hezbolá en territorio israelí poco después de los ataques perpetrados por Hamás el 7 de octubre de 2023. Estos eventos provocaron que Israel desatara una brutal ofensiva en la Franja de Gaza, que ya ha dejado un saldo devastador de 44.000 muertos.