El FBI y otras agencias de Inteligencia han revelado que hackers iraníes enviaron correos electrónicos no deseados a personas vinculadas con la campaña de Joe Biden en verano. Estos correos contenían material robado de la campaña de Donald Trump, candidato republicano y expresidente.

Además, los ciberdelincuentes iraníes han continuado enviando material robado y no público de la campaña de Trump a medios de comunicación estadounidenses desde junio. La Oficina del Director de Inteligencia Nacional (ODNI) y la Agencia de Seguridad Cibernética y de Infraestructura (CISA) han confirmado esta información en un comunicado conjunto.

La Inteligencia estadounidense ha expresado que esta actividad maliciosa forma parte de la estrategia de Irán para avivar la discordia y socavar la confianza en el proceso electoral de EE.UU. Trump se enfrentará en las elecciones a Kamala Harris, la número dos de Biden, en noviembre.

El FBI ha asegurado que está rastreando esta actividad, entrando en contacto con los afectados y recopilando información para perseguir a los responsables. Adicionalmente, ha alertado sobre el aumento de actividades de influencia electoral de actores extranjeros como China, que buscan exacerbar las divisiones en la sociedad estadounidense.

Según el FBI, Rusia, Irán y China intentan explotar las vulnerabilidades de EE.UU. durante los períodos electorales. Estos esfuerzos para socavar las instituciones democráticas del país no serán tolerados, de acuerdo con las declaraciones del FBI.

En agosto, la Inteligencia estadounidense concluyó que Irán estuvo detrás de los ciberataques contra las campañas tanto de Trump como de Biden. Irán habría intentado también hackear la campaña del Partido Demócrata, liderada por Biden en ese momento. Se atribuyeron a Irán actividades para comprometer la campaña de Trump y esfuerzos para acceder a personas con acceso directo a ambas campañas presidenciales.