Su intención es no contribuir al "circo" en el que piensan que los de Abascal desean transformar el Congreso a lo largo de un par de días
MADRID, 19 Mar.
Esquerra Republicana (ERC), EH Bildu y Más País van a aprovechar el enfrentamiento de la petición de censura de Ramón Tamames contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para emplazar al jefe del Ejecutivo a no 'dormirse en los lauros' en el último tramo de la legislatura y a impulsar hasta el desenlace medidas valientes que sirvan para cerrar el paso a una hipotética coalición que deje gobernar al PP y Vox después de las selecciones en general.
Estos partidos, comunes asociados parlamentarios del Gobierno, solo tienen la posibilidad de replicar en el enfrentamiento a Tamames, como candidato a la Presidencia del Gobierno, pero en sus alegato no obviarán a quien le muestra, el presidente de Vox, Santiago Abascal.
Según han adelantado a Europa Press fuentes de estas formaciones, posiblemente los portavoces de estos partidos no consuman en todo momento del que disponen, por el hecho de que ninguno desea contribuir al "circo" o el "espectáculo" que, a su juicio, ha montado Vox al recurrir a este instrumento constitucional para poner en un brete al partido de Alberto Núñez Feijóo, especialmente sabiendo que no posee ninguna oportunidad de éxito.
Pero eso no les va a impedir usar sus turnos de palabra para revisar las medidas que se fué aprobando durante la legislatura con el acompañamiento del bloque de investidura y reclamar a Sánchez que dé cumplimiento a las promesas que aún tienen apuntadas en el debe.
Lo van a hacer avisándole de que, a pesar del apretado calendario electoral con las municipales y autonómicas a tan solo un par de meses vista, debe explotar hasta el último instante para tomar medidas que alivien a los mucho más atacables y a quienes hacen frente con muchas adversidades por servirnos de un ejemplo, en alza del precio de los alimentos o de la vivienda.
Asumiendo el fracaso de su iniciativa de plantar a Tamames, el representante de ERC, Gabriel Rufián volvió a procurar este año un plante a la petición de censura de Vox, pero ahora ha asumido que su iniciativa no tuvo éxito y ha podido confirmar que intervendrá, si bien no agotará su tiempo.
En todo caso ahora avanzó que sus dardos no se dirigirá solo a Vox, sino solicitará cuentas a Sánchez pues es quien está rigiendo. "El Gobierno es imposible irse de rosa", anticipó tras su choque con el PSOE por el fracaso de la reforma de la 'ley mordaza'.
Menos pistas sobre sus pretenciones dió públicamente la representante de Bildu, Mertxe Aizpurua, quien ha desdeñado una petición que ve como una "broma absurda y de mal gusto" que solo busca "dar de comer la creciente desafección política", esa con la que, a su juicio, hay que pelear para, entre otras muchas cosas, cerrar el paso a una viable coalición PP-Vox.
Para el líder de Más País, Íñigo Errejón, esta idea, encabezada por un candidato "paradójico", es como una "autolesión de las derechas" pues no va contra el Gobierno sino más bien "contra el PP". Eso sí, el diputado madrileño insistirá en que el Ejecutivo de coalición no puede condicionar su "salud" a la "insolvencia de su oposición".
Una lectura similar hace el diputado de Compromís, Joan Baldoví, quien ve este enfrentamiento como "una pelea fratricida entre la derechita cobarde y heroica". El candidato a la Presidencia de la Generalitat Valenciana, ha garantizado que "tratará con todo el respeto debido" a Tamames, si bien vino ironizando con la oportunidad de que no recabe el acompañamiento de los 52 miembros del congreso de los diputados de Vox, a evaluar por ciertas de sus afirmaciones de las últimas semanas.
El representante del PNV, Aitor Esteban, dejó entrever la oportunidad de decantarse por una intervención corta. Ya en 2020, en el momento en que Abascal defendió su petición de censura contra Sánchez, el nacionalista vasco fue el que el menor tiempo dedicó a discutir con él y no bajó a la tribuna para contestarle. Lo logró desde su escaño, que está a menos de un metro del que ocupará Tamames, quien va a dirigirse al hemiciclo desde el taburete que frecuentemente ocupa Abascal.
Quien sí ha adelantado que su alegato va a ser "muy escueto" es el representante del PDeCAT, Ferran Bel, que dejará clara su situación pero no piensa contribuir a que el "circo esperpéntico" que, a su juicio, busca Vox, "vaya mucho más allí".
Ya ajeno de los asociados del Gobierno, Ciudadanos usará la cita para enseñar su modelo de país con proposiciones específicas. La representante nacional de Ciudadanos, Patricia Guasp, viene repitiendo que la petición iniciativa por Vox es "inútil" y ahora adelantó a fines de febrero el voto en oposición a los 'naranjas'. No obstante, desean explotar el escaparate del enfrentamiento y no opínan abandonar sus 30 minutos de intervención, que va a correr al cargo de la representante parlamentaria, Inés Arrimadas.
De su lado, la representante de Junts, Miriam Nogueras, atacará al PSOE por "dar de comer" el "circo ordenado por la ultraderecha" en vez de ayudar con la comisión del Parlamento Europeo que ese día va a estar en Madrid para investigar el espionaje a independentistas catalanes popular como 'caso Pegasus'. Su compañero el Grupo Plural y diputado del BNG, Néstor Rego, tampoco tiene intención de llevar a cabo el juego a Vox y podría explotar para poner encima de la mesa los temas atentos de su 'agenda gallega'.
El primer conjunto en subir a la tribuna en el enfrentamiento del martes va a ser el Mixto, con la CUP a la cabeza. Su miembro del congreso de los diputados, Mireia Vehí, que asimismo prevé aludir al 'caso Pegasus', presagia que el enfrentamiento dejará claro que "la extrema derecha no sirve ni para ser oposición", si bien Sánchez la utilice para enseñar al PSOE como un partido ubicado "a la izquierda".
También rechazarán la idea Coalición Canaria, el Partido Regionalista de Cantabria (PRC) y Teruel Existe, al tiempo que los 2 miembros del congreso de los diputados de Navarra Suma y el de Foro Asturias se abstendrán, igual que sus asociados electorales del PP.