En un giro inesperado en el mundo del fútbol, el exfutbolista y entrenador portugués Joao Pereira ha sido destituido de su cargo como técnico del Sporting Clube de Portugal. Esta decisión se hizo efectiva este jueves, después de haber dirigido al equipo en tan solo ocho partidos, un tiempo insuficiente para consolidar un proyecto deportivo serio. Rui Borges, también originario de Portugal, ha sido nombrado como su sustituto, según informó la propia institución.

El club, en un gesto que podría interpretarse como un intento de mantener las apariencias, agradeció a Pereira, quien tuvo una notable carrera como jugador en equipos como Benfica, Valencia y el propio Sporting CP, su trabajo en el banquillo. Cabe recordar que Pereira llegó al cargo tras la salida de Rúben Amorim, quien partió hacia el Manchester United, dejando una responsabilidad que, evidentemente, fue demasiado pesada para el nuevo técnico.

Los números hablan por sí solos y, lamentablemente para Pereira, no ha logrado los resultados esperados. De los ocho encuentros que dirigió, solo pudo celebrar tres victorias, una de las cuales fue en la liga nacional; sumó también un empate y se vio obligado a enfrentar la amarga realidad de cuatro derrotas, distribuidas entre la Champions League y la liga doméstica. A pesar de que el equipo ocupa actualmente el segundo lugar en el campeonato local, a solo un punto del líder, su situación en la Liga de Campeones es precaria, con el equipo posicionado en el decimoséptimo lugar y con la presión de no permitir más deslices si desea avanzar a la fase de 'playoffs'.

Con la salida de Pereira, el Sporting inicia una nueva etapa bajo la dirección de Rui Borges, un entrenador de 43 años que previamente estaba al mando del Vitoria Guimarães. Borges, quien comenzó su carrera como técnico en 2017, ha permanecido en los banquillos de equipos portugueses, y su experiencia se extiende a lo largo de 17 años como futbolista. La afición y la directiva del club ahora depositan sus esperanzas en que este cambio de timón les lleve a alcanzar los objetivos que han eludido hasta el momento.