El rey Juan Carlos regresó a España después de su visita a su nieta, la Princesa Leonor, en su cumpleaños número 18. Se dirigirá a Sanxenxo, donde se hospedará en casa de su amigo Pedro Campos para disfrutar de unos días de descanso.
A diferencia de sus viajes anteriores, el emérito llegó al Aeropuerto de Vitoria en lugar de Vigo. Aproximadamente a las 12 del mediodía, bajó del avión privado rodeado de fuertes medidas de seguridad, incluida la presencia de la Guardia Civil. Con la ayuda de su equipo de confianza, el rey Juan Carlos descendió las escaleras del avión para luego subirse a un vehículo que lo esperaba en la pista.
Después de pasar varias horas en la ciudad, don Juan Carlos regresó al Aeropuerto de Vitoria alrededor de las 17:30 de la tarde para tomar otro vuelo con destino a Vigo. Una vez más, se implementaron medidas de seguridad para garantizar un embarque sin incidentes. El escolta personal del rey Juan Carlos tuvo que subirse al avión para ayudarlo a subir las escaleras, ya que enfrentaba dificultades.