El Sumo Pontífice, en una muestra de preocupación por la escalada de violencia en el Líbano, expresó su consternación ante la tragedia que se ha desatado en la región. Los bombardeos israelíes han dejado un saldo de al menos 569 personas fallecidas durante los últimos dos días, generando un clima de caos y desolación en el país.
Tras la realización de la catequesis en la audiencia general de este miércoles, el Papa Francisco no dudó en calificar la situación como "inaceptable". Llamó a la comunidad internacional a unirse en un esfuerzo conjunto para detener la espiral de violencia que azota al Líbano y que ha cobrado tantas vidas inocentes.
"Las noticias que nos llegan desde el Líbano son francamente desgarradoras. Los intensos bombardeos de los últimos días han causado un gran número de víctimas y una destrucción sin precedentes. Es imperativo que la comunidad internacional actúe de inmediato para frenar esta escalada tan terrible. No podemos permitir que esta situación continúe", afirmó el líder de la Iglesia Católica.
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