El Parlamento Europeo ha dado un paso valiente al reconocer a Edmundo González como el "presidente legítimo" de Venezuela, en una votación en la que los socialdemócratas se opusieron y los liberales no participaron. Esta decisión, impulsada por el Partido Popular Europeo en colaboración con dos grupos de ultraderecha, ha sido respaldada por una amplia mayoría de 309 votos a favor, 201 en contra y 12 abstenciones.

Esta resolución coloca al Parlamento Europeo a la vanguardia del reconocimiento de Edmundo González como el líder legítimo y democráticamente elegido de Venezuela, así como a María Corina Machado como líder de las fuerzas democráticas en el país sudamericano.

Además, se insta a los Estados miembros de la UE a seguir el ejemplo y reconocer al veterano diplomático como presidente de Venezuela, con la esperanza de que asuma el cargo el 10 de enero de 2025. De igual manera, se pide a los actores regionales que ejerzan presión sobre el régimen de Nicolás Maduro para que respeten la voluntad democrática del pueblo venezolano y se prevenga un posible aumento en la migración si no se logra un traspaso pacífico de poder.

La resolución aprobada por los grupos de derecha urge a la UE y a sus Estados miembros a solicitar una orden de detención internacional contra Maduro por presuntos crímenes contra la humanidad, en respuesta a las graves violaciones de los derechos humanos que se han denunciado en Venezuela.

En cuanto a la política de la UE hacia Caracas, se reconoce que la flexibilización de las sanciones el pasado mes de mayo no tuvo un impacto positivo en el clima electoral, por lo que se plantea la necesidad de aumentar las medidas restrictivas. Se propone incluir nuevos nombres en la lista de sancionados, como miembros del CNE y figuras cercanas a Maduro, como el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez.

En resumen, la resolución condena enérgicamente el presunto fraude electoral en Venezuela y la falta de transparencia por parte del CNE en la publicación de resultados. Asimismo, se hace eco de las críticas de misiones internacionales de observación electoral y expertos de la ONU que cuestionan la legitimidad de las elecciones presidenciales recientes en el país.