MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
En un nuevo acto de agresión, el Ejército ruso ha llevado a cabo un ataque con drones que ha dejado al menos dos personas heridas y ha causado daños en un almacén industrial en la ciudad ucraniana de Leópolis. Esta acción demuestra una vez más la falta de respeto por la soberanía y la vida de los ciudadanos ucranianos por parte de Rusia.
Según ha informado el jefe de la Administración Militar Regional de Leópolis, Maksim Kozitski, a través de su canal de Telegram, una mujer y un hombre han sido encontrados bajo los escombros en Leópolis como consecuencia del ataque. La mujer se encuentra herida, mientras que el hombre está en estado grave.
Además, se ha reportado un gran incendio en el almacén industrial alcanzado por los drones. Este incidente pone en peligro la seguridad de las personas que allí trabajan y puede tener consecuencias económicas y medioambientales significativas para la región.
En otro incidente reciente, la defensa aérea ucraniana ha interceptado once drones 'shahed' que habían sido enviados con la intención de causar daños a la maquinaria agrícola de una empresa. Afortunadamente, no se han registrado víctimas en este caso, pero demuestra que la amenaza de los ataques aéreos rusos sigue presente en diferentes regiones de Ucrania.
Estos ataques ocurren en un momento de tensión y violencia, pero también de grave preocupación por la protección del patrimonio cultural de Ucrania. La Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha catalogado como patrimonio en peligro varios monumentos de Ucrania, incluyendo la catedral de Santa Sofía de Kiev y el casco histórico de la ciudad de Leópolis.
La UNESCO ha denunciado que desde el inicio de la ofensiva militar rusa en febrero de 2022, se han registrado daños en 289 enclaves patrimoniales en Ucrania. Estos incluyen lugares de importancia cultural e histórica en la región de Donetsk, donde se han documentado daños en 81 lugares, y en la región de Kiev, donde se han registrado 39 casos.
Está claro que los ataques rusos no solo ponen en peligro la vida y la seguridad de los ciudadanos ucranianos, sino también su herencia cultural. Es una tragedia ver cómo se destruyen siglos de historia y la identidad de un país en nombre de la agresión y la violencia. La comunidad internacional debe tomar medidas urgentes para detener estas acciones y proteger tanto a las personas como a su patrimonio.