El pasado 2 de noviembre, se llevaron a cabo los últimos encuentros del torneo WTA 250 en Hong Kong, donde la tenista española Cristina Bucsa se enfrentó a la prometedora jugadora canadiense Victoria Mboko en la gran final. Desafortunadamente, Bucsa no logró conquistar su primer título WTA en individuales, cayendo en un intenso partido que finalizó con un marcador de 7-5, 6-7(9) y 6-2 a favor de Mboko.

El encuentro comenzó de manera muy equilibrada. Bucsa, originaria de Torrelavega, tuvo a su disposición hasta cuatro oportunidades para romper el servicio de la canadiense en los primeros juegos del primer set, pero no pudo aprovecharlas. Este impreciso inicio le costó caro, ya que perdió su propio servicio, permitiendo que Mboko se pusiera 4-2 al frente.

A pesar de la presión, Bucsa no se rindió. Consiguió salvar dos bolas para set y logró quebrar el servicio de Mboko, acercándose a una posible remontada. Sin embargo, la canadiense demostró su fortaleza y, cuando llegó al 6-5, volvió a romper el servicio de Bucsa, sellando el primer set a su favor en su primera oportunidad.

El segundo set comenzó con un desafortunado 3-0 en contra para Bucsa, quien parecía estar luchando con la consistencia de su juego. Sin embargo, a medida que la canadiense mostraba signos de flaqueza, Bucsa aprovechó para igualar el marcador. A pesar de acercarse al final del set, perdió su saque en un momento crucial, pero en el emocionante tie-break, Bucsa se llevó la victoria con un ajustado 11-9, igualando así el encuentro.

Ya en el tercer set, Mboko no aflojó el ritmo y mantuvo el control sobre la partida. A pesar de los esfuerzos de Bucsa, quien tuvo oportunidades para romper el saque, la canadiense logró frenar sus intentos y rompió el servicio de la española en dos ocasiones. Con un 6-2, Mboko cerró el partido y se proclamó campeona, lo que supuso su segundo título en el circuito WTA.

Con esta derrota, Bucsa se queda a un paso de su sueño de conseguir su primer título WTA, y el tenis femenino español atraviesa un periodo desafiante, sin victorias en torneos importantes en 2025 y con tres representantes en el prestigioso 'top 100'. Es un momento crítico que necesita ser analizado y posiblemente rescatado de manera urgente para el futuro del tenis en España.