En un giro significativo en la discusión sobre la privacidad y el uso de datos en las redes sociales, Bluesky ha anunciado su intención de implementar una nueva opción de configuración que permitirá a los usuarios decidir si consienten que desarrolladores externos utilicen sus publicaciones e información para el entrenamiento de Inteligencia Artificial (IA).

La plataforma de microblogging, que ha acaparado la atención recientemente, declaró anteriormente su firme postura sobre la IA generativa. Aseguró que no utiliza datos de usuarios para el entrenamiento de sus modelos y que no tiene planes de hacerlo en el futuro próximo.

En un esfuerzo por tranquilizar a sus suscriptores, Bluesky ha precisado que no emplea "ninguno" de los contenidos generados por los usuarios para el entrenamiento de IA generativa. No obstante, la plataforma sí utiliza esta tecnología para mejorar la moderación de contenido y optimizar la experiencia del usuario a través de su feed algorítmico de 'Descubrir'

Recientemente, Bluesky compartió actualizaciones sobre su uso de la IA generativa, indicando que está explorando una opción de configuración que permitiría a los usuarios especificar si quieren que sus contenidos sean accesibles para que desarrolladores externos los integren en conjuntos de datos utilizados para el entrenamiento de IA.

En un hilo de publicaciones, la red social enfatizó que, al ser una plataforma pública y abierta, funciona de manera muy similar a otros sitios web en Internet. Esto implica que tales sitios pueden optar por especificar si permiten que empresas externas rastreen sus datos, utilizando herramientas como un archivo robot.txt para limitar el uso posterior de esos datos.

En este contexto, Bluesky está considerando la implementación de prácticas análogas a las que ya existen en la web, con el objetivo de dar a los usuarios más control sobre el seguimiento de sus datos y publicaciones por parte de empresas externas.

La plataforma ha indicado que esta nueva opción de configuración permitirá a los usuarios expresar si conceden permiso para que su contenido sea utilizado por desarrolladores externos. Sin embargo, es importante destacar que Bluesky ha subrayado que “no podrá asegurarse de que este consentimiento se respete fuera de su sistema”, lo que plantea interrogantes sobre la eficacia de tal medida en la práctica.

Esto significa que, aunque un usuario indique que no autoriza el uso de su contenido para el entrenamiento de IA, será finalmente decisión de los desarrolladores externos respetar estas configuraciones.

Actualmente, Bluesky afirma estar en “conversaciones continuas con ingenieros y abogados” para ultimar detalles sobre esta opción configurativa que afecta al uso de la información de los usuarios. La compañía prometió compartir más información sobre este tema en un futuro cercano.

La revelación de esta nueva funcionalidad para la gestión de datos coincide con la publicación de un empleado de Hugging Face, donde se expone un millón de publicaciones extraídas de Bluesky a través de su API y subidas a un repositorio destinado a IA.

Hugging Face ha señalado en su explicación que la carga de estos datos provocó en torno a su creación y gestión, así como sobre el uso de la información de los usuarios. Como resultado, la compañía tomó la decisión de eliminar los datos de Bluesky de su repositorio, aclarando que su intención de “apoyar el desarrollo de herramientas para la plataforma” contradice los principios de transparencia y consentimiento en la recopilación de datos.