BlaBlaCar reduce emisión de 2 millones de toneladas de CO2 en 2023.
MADRID, 23 Sep.
BlaBlaCar ha logrado un gran hito al reducir 2 millones de toneladas de CO2 en el año 2023 en los 21 países donde opera, según revela el Informe Anual ESG de la plataforma. Este informe examina el impacto medioambiental, económico y social del coche compartido durante dicho período.
Se destaca que, de no ser por BlaBlaCar, las emisiones de dióxido de carbono habrían sido de 6,35 millones de toneladas en lugar de los 4,34 millones registrados.
El informe también señala que los conductores de BlaBlaCar en España han ahorrado 51 millones de euros en 2023, lo cual supone un importante alivio en medio de un aumento en el coste de vida. A nivel global, este ahorro asciende a 513 millones de euros.
Es relevante mencionar el impacto del coche compartido en áreas con baja densidad de población. A diferencia de otros medios de transporte, que necesitan grandes flujos de pasajeros para justificar infraestructuras y servicios de transporte, el carsharing utiliza infraestructuras existentes para llegar a zonas menos pobladas, contribuyendo a reducir la brecha territorial.
Durante el último año, la plataforma ha conectado el 85% de los más de 8.100 municipios españoles. Según una encuesta de movilidad sostenible realizada por la compañía, el 95% de los encuestados está de acuerdo en que el carpooling puede mejorar las opciones de movilidad que enlazan las pequeñas poblaciones.
En el año 2023, BlaBlaCar ha establecido conexión en más de 115.000 puntos de encuentro diferentes en la Península, ampliando la accesibilidad del sistema de transporte.
Estos beneficios ya han sido reconocidos a nivel legislativo por diversos gobiernos autonómicos, como los de Andalucía y el País Vasco, y se están considerando en el actual proyecto de Ley de Movilidad Sostenible que se encuentra en proceso parlamentario. De hecho, el 84% de los encuestados considera crucial que el coche compartido esté regulado y respaldado públicamente en España.
Recientemente, BlaBlaCar ha sido incluido en el sistema de Certificados de Ahorro Energético (CAEs) de la Unión Europea, adoptado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Este sistema busca reducir la dependencia de combustibles fósiles, combatir el cambio climático y promover el crecimiento económico y el empleo.