Las autoridades de Ucrania han denunciado un nuevo ataque que se ha ejecutado con un misil balístico, dirigido a instalaciones consideradas de "crítica" importancia, el cual se llevó a cabo a la medianoche del pasado domingo. Esta serie de ataques ha despertado la indignación internacional y ha llevado a las autoridades a exigir responsabilidades.

En la misma línea, Josep Borrell, Alto Representante de Política Exterior de la Unión Europea, ha anunciado que planteará la necesidad urgente de "más defensa aérea" para el país ucraniano en las próximas reuniones de los ministros de Exteriores y Defensa de la Unión, compuesta por veintisiete naciones. Este llamado se enmarca en la creciente preocupación por la seguridad en la región durante los meses más fríos del año.

El último ataque con misiles, llevado a cabo por el Ejército ruso en una área densamente poblada de la ciudad ucraniana de Sumi, ha dejado un trágico saldo de diez muertos y al menos 52 heridos, según las cifras proporcionadas por las autoridades ucranianas. Este ataque ha generado una ola de temor y tristeza entre la población local, que ya ha vivido numerosas agresiones.

El jefe de la administración militar regional de Sumi, Volodimir Artiukh, describió la situación en la ciudad como un "infierno" y una "tragedia" traída por Rusia a su territorio. En sus declaraciones, destacó que la falta de electricidad ha agravado el caos y el sufrimiento de los habitantes de la zona afectada, quienes ahora enfrentan las consecuencias de este ataque indiscriminado.

Artiukh también compartió que más de 400 residentes han sido evacuados del área golpeada, y que se están llevando a cabo operaciones de rescate por parte de los servicios de emergencia, la policía y un grupo de voluntarios locales. Esta solidaridad entre los ciudadanos de Sumi se ha manifestado en actos de ayuda hacia sus compatriotas, uniendo a la comunidad en un momento de dolor y adversidad.

El informe de la Fiscalía ucraniana indica que el ataque ocurrió aproximadamente a las 20:37 horas, hora local, y ha causado daños significativos en al menos diez edificios de gran altura. Entre las víctimas fatales se encuentran dos menores, de nueve y catorce años, además de tres niños que ahora se encuentran entre los heridos. La situación se agrava aún más con la noticia de un segundo ataque, que se ha descrito "probablemente" como otro lanzamiento de misil balístico dirigido a infraestructura crítica a las 00:10 horas.

En respuesta a este hecho, la Fiscalía regional de Sumi ha acusado a las tropas rusas de emplear "métodos de guerra prohibidos por el Derecho Internacional" durante este ataque, lo que ha llevado a la apertura de una investigación preliminar sobre posibles violaciones de las leyes y costumbres de la guerra.

Por otro lado, Borrell ha hecho eco del repudio internacional al ataque "masivo" que ha llevado a cabo el Ejército ruso contra civiles, enfatizando que las fuerzas rusas han apuntado de manera específica a la infraestructura energética, incluyendo la nuclear, en un intento por desestabilizar a Ucrania antes del invierno. "Ucrania necesita más defensa aérea, ¡ya!" afirmó Borrell, subrayando que esta será una de las prioridades que presentará en la reunión del Consejo de Asuntos Exteriores y del Consejo de Defensa, que se celebrará este lunes en Bruselas.