En una nueva escalada de violencia en Oriente Medio, la base militar de Victoria en Bagdad, Irak, fue atacada esta noche con tres proyectiles. Aunque no se han confirmado oficialmente los daños, fuentes de seguridad iraquíes informaron que solo se incendiaron cuatro vehículos civiles y no hubo víctimas humanas.

Las fuerzas de seguridad lograron desmantelar y neutralizar los proyectiles lanzados desde una plataforma cercana a Al Amiriya, al oeste de Bagdad. Mientras tanto, el Departamento de Defensa de Estados Unidos está investigando lo sucedido, según un portavoz.

La Resistencia Islámica de Irak, una coalición de milicias proiraníes, ha llevado a cabo numerosos ataques contra bases estadounidenses en la región, en respuesta a conflictos previos. Estos enfrentamientos han provocado tensiones significativas entre las partes involucradas.

En medio de esta situación, el Gobierno de Irak y Estados Unidos han acordado la retirada de tropas internacionales del país para fines de septiembre de 2025, seguido de una transición hacia una asociación de seguridad bilateral. Mientras tanto, funcionarios de ambos países se han reunido para discutir estrategias contra el Estado Islámico y garantizar la estabilidad en la región.

La Coalición Internacional para combatir al Estado Islámico ha elogiado la cooperación de Irak en la lucha contra el grupo terrorista y se ha comprometido a apoyar los esfuerzos del gobierno iraquí para garantizar la seguridad y desarrollo del país. Entre las prioridades de la coalición se encuentra la implementación de soluciones duraderas para las poblaciones afectadas por el conflicto y la persecución de yihadistas detenidos.