Armengol advierte que no aceptará comportamientos "machistas" en el Congreso tras incidente entre Vox y Podemos.
La presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, ha reaccionado de forma contundente ante las declaraciones del diputado de Vox, Manuel Mariscal, quien se atrevió a calificar la dictadura franquista como un periodo de “progreso y reconciliación”. Armengol ha calificado estas afirmaciones de “absolutamente reprobables” y ha señalado que constituyen una clara apología del franquismo.
Durante las Jornadas de Puertas Abiertas del Congreso, Armengol abordó no solo la controvertida declaración de Mariscal, sino también otro incidente que tuvo lugar en la cámara, donde el diputado de Vox Pedro Fernández fue objeto de críticas tras dirigirse de manera despectiva a la diputada de Podemos, Martina Velarde. La presidenta advirtió que no tolerará actitudes que consideró “machistas” en el hemiciclo.
Al ser preguntada sobre el incidente entre Fernández y Velarde, Armengol comentó que ella no pudo percibir el insulto en el momento en que ocurrió, pero rápidamente se puso en contacto con la diputada afectada para obtener detalles sobre lo acontecido. La respuesta inmediata de la presidenta fue llamar al orden a Fernández, enfatizando que los insultos en el Congreso no son aceptables, y mucho menos los comportamientos que promueven la misoginia, pese a la inmunidad parlamentaria de los diputados.
La posibilidad de sancionar a Fernández fue otro tema abordado por Armengol, quien explicó que según el reglamento del Congreso, las sanciones solo se pueden imponer tras una tercera llamada al orden, mientras que en este caso solo se llevó a cabo una. En su intervención, la presidenta hizo hincapié en la necesidad de mantener el respeto hacia la Cámara, recordando que los parlamentarios son representantes de la ciudadanía y deben actuar en consecuencia.
Además, Armengol lamentó que su “único recurso” desde la presidencia sea retirar los insultos del diario de sesiones, a pesar de que seguirán quedando registrados de manera cursiva. Esta situación la llevó a hacer un llamado a la responsabilidad individual de cada diputado en el ejercicio de su función.
En relación a las palabras de Mariscal, la presidenta socialista no solo condenó su contenido, sino que también argumentó que su afirmación sobre el franquismo no es más que “una apología clara” de una dictadura que dejó profundas heridas en la sociedad española. Armengol reafirmó su convicción de que hablar de un periodo de “buena etapa” en la historia democrática resulta “inasumible y absolutamente reprobable”, especialmente cuando se realiza desde la tribuna parlamentaria y en contradicción con la Ley de Memoria Democrática que rige en España.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.