En un reciente avistamiento que ha causado revuelo, la pareja compuesta por Ana Boyer y su esposo, Fernando Verdasco, disfrutó de una agradable velada a solas en un célebre restaurante en el centro de Madrid. Este encuentro se produjo en un momento en que ambos se encuentran en una fase de descanso, aprovechando al máximo su tiempo libre.

A pesar de las intensas giras y compromisos que demanda la carrera del tenista Verdasco, la hija de Isabel Preysler se esfuerza por valorar cada instante que logran pasar juntos. Durante esta cena, la pareja se sumergió en íntimas conversaciones, compartiendo confidencias que fortalecen su vínculo marital.

Cuando finalmente dejaron la residencia de la socialité, lo hicieron con mucha discreción, llegando al establecimiento en un vehículo privado. Este protocolo se mantuvo también al salir: Verdasco fue el primero en salir para recoger su coche, mientras que Ana, hermana de Tamara Falcó, lo hizo minutos después, subiendo rápidamente al automóvil.

Por otro lado, la selección de atuendo de Ana reflejó una inclinación hacia la comodidad y la elegancia. Optó por un conjunto de jeans acampanados, un jersey de punto celeste y un abrigo de paño en un atractivo tono beige, complementando su look otoñal con unas botas altas que le conferían un estilo chic y desenfadado.