• viernes 31 de marzo del 2023
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Álvaro García se protege de las críticas de PP, Vox y Cs, que le afean ser "un calco" de Delgado y su "afinidad" al PSOE

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Se compromete a que la FGE actúe con mucho más transparencia: "Intentaremos que el fiscal general no sea el rey Sol"

MADRID, 28 Jul.

El candidato a fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ha reivindicado este jueves en el Congreso de los Diputados su valía para ocupar el puesto en frente de las críticas de PP, Vox y Ciudadanos, que le han acusado de ser "un calco" de su precursora, Dolores Delgado, le han recriminado su "afinidad" al PSOE por asistir a un acto con socialistas gallegos y le han afeado la posición de la Fiscalía en las situaciones 'Miguel Ángel Blanco' y 'Stampa'.

García Ortiz ha comparecido frente a la Comisión de Justicia como una parte del desarrollo legalmente predeterminado para ser afirmado como fiscal general del Estado, un trámite que el vicepresidente primero de esa Comisión, el diputado 'morado' Roberto Uriarte, dió por evacuado, anunciando que de esta forma se los trasladará a la presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet, para que paralelamente se lo indique al Gobierno.

La audiencia estuvo marcada por las acusaciones vertidas por PP, Vox y Ciudadanos, que dejaron claro que no estiman que García Ortiz, hasta la actualidad jefe de la Secretaría Técnica de la Fiscalía General del Estado (FGE) sea la persona correcta para encabezar el Ministerio Público al deducir que no cumple con la adecuada imparcialidad, autonomía y neutralidad con en comparación con Gobierno.

"Usted fué mano derecha, mano izquierda y 'alter ego' de Delgado", dijo el diputado del PP Luis Santamaría, que llegó a tildar a García Ortiz de "calco" de la fiscal general dimitida, a la que ha culpado de "entre las etapas mucho más negras de la democracia" en lo que a la FGE tiene relación. A su juicio, esta cercanía entre los dos le hace "responsable en una parte del descrédito de la institución".

En exactamente la misma línea, el diputado de Vox, Javier Ortega Smith, ha sostenido que el hecho de tener como "cartas de presentación" ser "el candidato de Pedro Sánchez y el ahijado de Dolores Delgado" provoca que carezca "de cualquier requisito de imparcialidad" y de la "idoneidad mínima" para desempeñar el cargo.

"A mí me hubiese dado gusto que usted fuera un individuo indiscutible (...), que absolutamente nadie afirmara que es similar al PSOE, y que fue y proseguirá siendo mano derecha de Delgado, un individuo que jamás hubo de ser fiscal general", ha manifestado, por su lado, el diputado de Ciudadanos Edmundo Bal, para finalizar que García Ortiz "no posee esa imagen" de imparcialidad, neutralidad y también independencia que necesita el cargo.

El candidato ha amado dejar en claro que no es el "número 2" de la carrera fiscal, sino más bien "sencillamente" el jefe de la Secretaría Técnica, un trabajo que ha recordado que realizaron otros antes, incluyendo el magistrado del TS Manuel Marchena, "al servicio del fiscal general". "Sobre ellos no va a haber mantón de sospecha (...), lo que no comprendo es por qué razón seré diferente", ha apuntado, para añadir: "Lo que no comprendo es lo maligna que es Delgado" para muchos.

No obstante, ha aceptado que, si bien en nuestro modelo compete al Gobierno denominar al fiscal general, puede ser mejorable a través de una reforma legal, que --ha subrayado-- es tarea de las Cortes En general. En todo caso, se ha puesto en compromiso a una mayor transparencia en la actuación de la FGE: "Intentaremos que el fiscal general no sea el rey Sol".

Santamaría asimismo le ha acusado de incumplir el Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal (EOMF) por asistir a un acto ordenado en Galicia por la Fundación Ideas, enlazada al PSOE. "Dejó bien claro cuál es su afinidad y vinculación con un preciso partido", ha señalado Ortega Smith.

García Ortiz respondió que entiende que les haya "molestado" que asista a "un acto con logotipos del PSOE", más allá de que ha recalcado que no infringió el EOMF por el hecho de que solicitó permiso a la Inspección Fiscal y se le concedió, al paso que enfatizó que los fiscales asimismo tienen independencia de expresión, criticando que este derecho se le reconozca "a un campo y no a otro". Asimismo, ha subrayado que en el acontecimiento se charló de incendios forestales.

Otro de los focos de crítica fué la situación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional (AN) con relación a la investigación contra los ex- jefes de ETA por su presunta implicación en el rapto y asesinato del concejal 'habitual' Miguel Ángel Blanco. Bal le ha reprochado que, si había "inquietudes" sobre si los hechos podían estar precriptos debería haberse posicionado "de lado de las víctimas", no de "los verdugos", misma crítica que le publicaron Vox y PP.

A este respecto, ha asegurado que "no se dieron directivas de ningún género, y bastante menos de carácter político" para ver la prescripción, incidiendo en que la Fiscalía ha apoyado la reapertura de esta y otras causas contra ex- jefes de ETA y en que aún no nos encontramos en el instante procesal "oportuno" para charlar de la caducidad de los delitos. En cualquier situación, anunció que el tema se elevará a la Junta de Fiscales de Sala para fijar método.

Asimismo, Santamaría y Bal han señalado que siete vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) difundieron voto especial rechazando su idoneidad, por ejemplo cuestiones, por la administración del 'caso Stampa'. En la réplica, García Ortiz les ha señalado que otros 12 votaron avalándole y ha acusado a los siete vocales de traspasar la "línea roja" por charlar de un caso que aún colea en los tribunales. "Me he sentido como en un tribunal de honor", ha lamentado.

No obstante, ha entrado en el fondo del tema para asegurar que "no existe nada que censurar" en su actuación, aduciendo que si se hubiesen seguido antes sus "sugerencias" en las pesquisas internas sobre Stampa, "si se hubiese hecho bien esa instrucción", habría acabado antes.

Además, el PP le ha preguntado si comparte la opinión de Sánchez en relación a los ex- presidentes andaluces condenados por los ERE, Manuel Chaves y José Antonio Griñán, de que "abonan justos por pecadores" y si "las prisas" del Gobierno por "ocupar el Tribunal Constitucional" tienen relación con una eventual suspensión de la entrada en prisión del segundo, con si "se marcha mejorando el indulto" a los dos. Bal, por su lado, ha letrado por reformar la ley para prohibir los indultos por corrupción y por agredir la unidad territorial.

PP y Vox asimismo quisieron entender qué va a sospechar la "desjudicialización" del "enfrentamiento" en Cataluña, algo sobre lo que el candidato no se pronounció. "¿Va a haber impunidad para quiénes fomenten golpes de Estado, va a fomentar indultos a fin de que los cobardes escapados no comparezcan?", ha espetado Ortega Smith.

Desde otra óptica, se lo han planteado Jon Iñárritu (Bildu), que ha pedido solucionar estos "enfrentamientos" con "política"; Josep Pages (Junts), que ha instado a que "la FGE deje de impulsar montajes judiciales contra el independentismo catalán"; Genís Boadella (PDCat), que ha urgido a "alzar el solicita del acelerador de esta acción premeditada en el 'proces'"; y Jaume Asens, de Unidas Podemos, que ha solicitado ignorar la "judicialización de la política".

Los miembros del congreso de los diputados de Bildu y de partidos catalanes le han exhortado asimismo a llegar hasta el fondo de las indagaciones sobre el supuesto espionaje con Pegasus y le han llamado la atención sobre las "cloacas" del Estado, algo sobre lo que Asens ha alertado del mismo modo por su intervención para "crear pruebas" contra la capacitación 'morada'.

La audiencia ha servido además de esto a fin de que García Ortiz expusiera su emprendimiento, con el que se ha puesto en compromiso a remarcar la autonomía de la FGE y el "derecho a discrepar" de los fiscales; realizar "transversal" la visión de género; hacer mas fuerte la protección a menores y víctimas de trata; "redefinir" la AN a fin de que sume a su especialización antiterrorista la pelea contra la corrupción, el narcotráfico y el delito ordenado; y ser fiscal general para "todos y cada uno de los fiscales".