• jueves 30 de marzo del 2023
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Alonso y Sainz disparan la ilusión

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El test de los dos pilotos ha despertado la seguridad entre los seguidores españoles, que creen en la '33' del asturiano y en el regreso de Ferrari

MADRID, 1 Mar.

Fernando Alonso (Aston Martin) y Carlos Sainz (Ferrari) van a ser los 2 reprentantes españoles en la novedosa campaña de Fórmula 1, que comienza este fin de semana en el Circuito Internacional de Baréin, donde va a ser la 20ª temporada del asturiano, el mucho más veterano con 41 años, en el Mundial con la motivación íntegra, al tiempo que el madrileño encara su noveno curso en el 'Gran Circo', el tercero en la 'Scuderia', todavía con bastante potencial.

Tras 'El Plan' sin éxito en Alpine el curso pasado, el bicampeón consiguió con unos test muy ilusionantes y confrontados en Baréin crear fe y creencia en 'La Misión' y la victoria número 33 con Aston Martin, escudería que semeja haber revivido con el español al mando, al tiempo que Sainz prosigue haciendo un trabajo estable para ser parte clave en el rencuentro de Ferrari con el título.

Con el dominio claro de Red Bull desde el momento en que arrancó el banco de pruebas en Sakhir, Alonso fue un 'reloj' sobre el trazado del golfo Pérsico, con tandas de simulación de carrera muy ilusionantes, siempre y en todo momento cerca de Max Verstappen. La segunda día en Baréin fue la mucho más productiva para el asturiano, finalizando en tercer puesto (1:32.205), a solo medio segundo del vigente vencedor (1:31.650).

Tanto Aston Martin, con un monoplaza prácticamente nuevo, como Alonso fueron la sensación de los test, metiendo la cabeza entre los teóricos aspirantes -Ferrari y Mercedes- a ser la opción alternativa, con considerablemente más que ganar que perder. Y es que, si bien la pretemporada podría ser un mero espejismo, el AMR23 tiene buenísima pinta para, por lo menos, ser la cuarta escudería de la parrilla y ver de tú a tú a los Charles Leclerc, Sainz, Lewis Hamilton y George Russell, y por enfrente de Alpine y McLaren.

Los conocidos pontones, a medio sendero entre Red Bull y Ferrari, semejan dar al AMR23 una seguridad y rigidez sobre la pista mayor a sus teóricos contendientes de la región media. Y le transforman en un vehículo ágil y 'simple' de domesticar, que aun impide, como los Red Bull, el fastidioso 'porpoising'. Y esto despertó sorpresa en nuestra parrilla, con los equipos 'rindiéndose' a la iniciativa de la escudería inglesa.

"Mercedes, Ferrari y quizás Aston Martin. No me intriga ninguno mucho más", aseveró el respetado directivo técnico del aparato Red Bull, Adrian Newey, sobre los potenciales contrincantes para el aparato de la bebida energética. Desde Mercedes asimismo encomiaron a Aston Martin. "Tienen la posibilidad de ser los segundos (en Baréin)", apuntó su jefe de aparato, Toto Wolff.

Incluso nuestro Fernando Alonso reconoció que el ritmo del AMR23 superó las esperanzas. "El último día, por servirnos de un ejemplo, hicimos una simulación de carrera a 57 vueltas, lo que haremos en Baréin. Ferrari hacía exactamente el mismo programa, con exactamente la misma gasolina y exactamente las mismas paradas, y fuimos mucho más veloces que ellos", apuntó tras el test oficial de pretemporada.

Argumentos, todavía poco acertados y algo solubles, pero suficientes para producir un aura de religión que rodearán al asturiano en el estreno de la temporada de 2023 este fin de semana. El propósito: la victoria número 33 de la carrera de Alonso, que no se sube al primer cajón desde el Gran Premio de España de 2013, con Ferrari.

El curso pasado empezó de la mejor forma para Ferrari, siendo muy superiores en lo que a agilidad tiene relación con 2 triunfos en las tres primeras carreras. Ninguno de ellos del español Carlos Sainz, que debió aguardar al décimo Gran Premio en Silverstone para festejar su primera victoria en la Fórmula 1.

Pero por último el emprendimiento de la 'Scuderia' no estuvo a la altura, con inconvenientes de confiabilidad y estrategia y dejando el título en bandeja a un lanzado y también incontenible Verstappen que no desaprovechó los 'regalos' de el 'Cavallino Rampante'. El madrileño solo ha podido finalizar quinto el Mundial, tras un George Russell con un monoplaza con peores posibilidades a priori.

Sin embargo, la pretemporada de 2023 fué otra historia y han erigido a Ferrari como una escudería con potencial para cuestionar el poderío de Red Bull. Han rodado veloz ganando ese punto plus de confiabilidad que echaron de menos en 2022, lo que les da una situación de partida que se causó el curso pasado y de la que tienen que haber aprendido.

El madrileño fue de menos a mucho más, progresando sus cronos día a día en el test de Baréin y marcando un competitivo 1:31.036, en exactamente la misma décima que su compañero Leclerc, si bien mucho más contento con lo que semeja ahora mucho más amoldado al turismo que el año pasado. "La confiabilidad fue de nuevo buenísima y pudimos examinar todas y cada una de las configuraciones que nos planteamos evaluar. El propósito es estar listo para la semana próxima", aseveró Sainz tras la segunda día de pretemporada.

No obstante, la progresión y mejora de Sainz debe estar a nivel del reto enorme que encara Ferrari en 2023, ahora sin Mattia Binotto en la composición, y con recobrar el título como obsesión. Y es que el último vencedor de la 'Scuderia' fue el finlandés Kimi Raikkonen en 2007. Hace 16 años que el 'Cavallino Rampante' no 'monta' a un conduzco que logre descorchar el champán con el título en la mochila. En 2023, Carlos Sainz desea transformarse en le nuevo héroe de la escudería italiana.