MADRID, 14 Oct.
La higiene de manos es primordial para eludir la propagación de infecciones y anomalías de la salud, como quedó probado a lo largo de la pandemia por la COVID-19. Sin embargo, UNICEF cree que 3 de cada diez personas en el mundo entero carecen de instalaciones básicas para lavarse las manos con agua y jabón; y que unos 700 pequeños y pequeñas mueren cada día por anomalías de la salud ocasionadas por un agua, saneamiento y también higiene inapropiados.
Con fundamento de la celebración del Día Mundial del Lavado de Manos, que se festeja este 15 de octubre, UNICEF demanda que la falta de instalaciones para lavarse las manos con agua y jabón en su casa perjudica a unos 2.300 millones de pequeños y sus familias en el mundo entero.
Además, apunta que solo media parta de los centros de salud en el planeta tienen un servicio básico de higiene de manos. Tampoco tienen estas infraestructuras 2 de cada 5 academias (cerca del 42%), lo que perjudica a mucho más de 800 millones de pequeños y jóvenes.
Las implicaciones y provecho del lavado de manos son varias puesto que disminuye la carga de múltiples patologías causantes de inconvenientes crónicos para la salud y el avance de los pequeños y pequeñas, disminuye las tasas de absentismo escolar hasta en un 43% y es aporta un beneficio para el confort, la dignidad, la satisfacción escolar y la eficacia, según UNICEF.
Por su parte, AUARA desea rememorar que el acto diario de lavarse las manos es increíble para miles de individuos y que, por medio de la solidaridad y la cooperación al avance, es viable progresar sus condiciones de vida.
La compañía popular que destina el cien% de sus dividendos a hacer más simple agua bebible y saneamiento a ciudades de países en vías de avance instaló sistemas de saneamiento y también higiene en siete institutos de Camboya, India y Etiopía, admitiendo que cerca de 2.000 estudiantes y instructores logren cada día resguardar su salud a través del lavado de manos.
El encontronazo popular de estos proyectos, cuantificado a través de el retorno popular de la inversión (SROI) efectuada para crear estas infraestructuras, es mayor a 103.300 euros, como apunta la compañía.
En exactamente la misma línea trabaja la Fundación We Are Water que ha ayudado, desde su creación en 2010, a frenar las anomalías de la salud transmitidas por el agua en estado deplorable y la carencia de saneamiento y también higiene con 83 proyectos en 31 países.
Estos proyectos han contribuido a parar la diarrea y las infecciones respiratorias entre sus mucho más de 3,5 miles de individuos favorecidas, tal como a frenar la propagación del coronavirus, por medio de los distintos proyectos puestos en marcha y relacionados con la práctica de una aceptable higiene. Para ello, impulsó instalaciones de saneamiento, pozos, manantiales y campañas de concienciación.